Pasar al contenido principal
  • La ruta de las huellas fósiles: Un paseo por los mares antiguos de Monsagro.
    The fossil traces route of Monsagro

Ruta de las huellas fósiles de Monsagro y Centro de Interpretación de los Mares Antiguos

A orillas del río Agadón, en el Parque Natural de Las Batuecas - Sierra de Francia y formando parte de la Reserva de la Biosfera de las sierras de Béjar y de Francia, está Monsagro, el primer refugio en las faldas de la gran montaña que preside el Santuario de la Peña de Francia.

La localidad de Monsagro esconde al visitante una original propuesta: la ruta de las Huellas Fósiles, un nuevo itinerario urbano que descubre y explica las huellas de distintos organismos de hace 450 millones de años, visibles en las roc as que adornan las casas, calles y fuentes de este pueblo.

En aquella época, un frío océano cubría gran parte de la Península Ibérica, que estaba situada muy cerca del Polo Sur. En ese mar de aguas poco profundas vivían distintos organismos, como los trilobites, ya desaparecidos, gusanos y otras especies, cuyos rastros quedaron grabados en los fondos marinos arenosos que orogenias posteriores transformaron en las cuarcitas.

Así es posible observar Cruzianas, que reflejan los desplazamientos de los trilobites, o Rusophycus, que representan zonas de reposo. Los gusanos marinos han dejado huellas como los Skolithos o galerías verticales, utilizadas de morada y estructuras en forma de cono llamadas Daedalus.

Centro de Interpretación de los Mares Antiguos

En 2018 abrió sus puertas el Centro de Interpretación de los Mares Antiguos de Monsagro.

El recorrido comienza atravesando el Túnel del Tiempo, en el que a través de diferentes videos podremos conocer la evolución de la Tierra, y las diferentes especies marinas que habitaban los mares en esa época.

La visita sigue con una proyección sobre el origen de las huellas de fósiles marinos que han aparecido en las cuarcitas de Monsagro y sus alrededores, además de explicar por qué hace 480 millones de años esa zona estaba bañada por un mar.

En la siguiente sala podremos observar algunos fósiles procedentes de distintos periodos geológicos, y aprenderemos a interpretar las “crucianas”, que son los rastros fósiles que hay en las fachadas de muchas de las casas del pueblo de Monsagro.

Y para finalizar la visita en el centro, podremos sumergirnos en un mar de hace 458 millones de años, y coger trilobites con nuestras manos a través de la realidad virtual.

Además de este paseo por los mares antiguos, Monsagro ofrece otras interesantes propuestas, como es el museo etnográfico de la cultura tradicional y de la caza, las antiguas eras levantadas sobre muros, el recoleto puente de la Yunta o un baño en el charco de los Mozos. Imprescindible subir a la Peña de Francia, santuario de la Virgen Negra y espléndido mirador a 1.723 metros de altura, de toda Salamanca.

Galería