Castillo de San Felices de los Gallegos

En tierras del poniente salmantino se levanta esta fortaleza, claro ejemplo de los vaivenes y disputas de frontera. Según las crónicas, fue edificada en el siglo XIII por el rey portugués Don Dinis, aunque adoptó su forma definitiva en el siglo XV.

Con un carácter de palacio fortaleza, está situada en uno de los extremos del casco urbano. Su diseño irregular se adapta a las peculiaridades del terreno, conservándose restos del antiguo foso y de la cerca vieja. También son visibles las defensas abaluartadas que se construyeron en el siglo XVIII con motivo de la Guerra de la Independencia.

Destaca la magnífica torre del Homenaje, que se puede observar desde numerosos puntos de los alrededores. Distribuida en tres plantas, su interior alberga el Aula Histórica de la villa y una exposición didáctica sobre las Fortificaciones de Frontera.

Es recomendable la ascensión a lo más alto de la torre para contemplar la belleza del municipio y de las vecinas tierras portuguesas.